Impulsando el contraste de impresión: conquista de la definición de los bordes

Una de las variables más significativas para mejorar el desempeño de la impresión en flexografía es la optimización del contraste de impresión. Pero este ha sido un objetivo esquivo en nuestra industria por muchos años.

Normalmente es difícil de cuantificar. En el contraste de impresión se mide la relación directa entre densidad y ganancia, generalmente calculada sobre el 75%.  Pero… ¿cómo están los impresores adquiriendo hoy un mejor contraste de impresión?

El contraste de impresión ideal está en el rango del 40-60%, con una buena densidad y ganancia de punto estable a través de las imágenes. La fórmula toma el valor de densidad del 75%, y la densidad en el sólido, y el porcentaje nos genera el valor de contraste de impresión. Esta función está disponible en todos los espectro-densitómetros. Un porcentaje bajo, por debajo del 30%, es un indicador de alta ganancia en el rango de las sombras, síntoma de los porcentajes se están tapando, y el detalle de la imagen está perdiendo definición.

Para aumentar el contraste de impresión, y dejar “boquiabiertos” a todos aquellos que compren el empaque en el supermercado, los impresores flexo están explorando nuevas alternativas, altas lineaturas de anilox, tintas de mejor pigmentación y planchas de alta definición. Las planchas de última tecnología optimizan la transferencia en los sólidos, mejoran el rango tonal, entregan colores más brillantes y textos más nítidos.

Históricamente la flexografía ha estado atrás del rotograbado y de su habilidad para reproducir colores vibrantes, ricos en tonalidad y de contraste necesarios para facilitar la lectura de textos en cualquier tamaño. El rotograbado estaba definido como el mejor método para imprimir por resultados, pero su alto costo y complejidad lo ponían fuera de alcance a muchos, haciendo que la flexografía predominara en nuestra región Latinoamericana.

Las tecnologías emergentes, desarrolladas en los últimos años, han cambiado la forma en que los propietarios de marcas, los proveedores de pre-impresión e impresores ven a la flexografía, haciéndola un poderoso competidor del rotograbado. La flexografía ahora puede competir al mismo nivel logrando contraste de impresión y resultados con mayor simplicidad en preprensa, algo inalcanzable, de muchas maneras, para el rotograbado.

La nueva tecnología presente en las planchas flexo nos hace olvidar esas limitaciones, y nos muestra nuevas oportunidades que han surgido para facilitar el desarrollo de nuevos diseños. Las microtexturas que nos generan una excelente transferencia en los sólidos ahora son soportadas por la tecnología de Definición Avanzada de Bordes, DAB, que lleva la impresión flexográfica a niveles más altos de calidad y de eficiencia.

Una parte clave de la tecnología de planchas con microtexturas – y un arma secreta para los impresores flexo – es esta tecnología DAB, una característica adicional a la texturización.  Ya sabemos que las microtexturas hacen fluir la tinta adaptándose a cada condición de impresión (tinta, anilox, prensa, etc.) para lograr la mejor transferencia y sólido posible, ahorrando tinta. Pero esto no sería posible sin DAB, que permite controlar la tinta en cada borde de cada línea, punto, texto o sólido presente en el diseño.

DAB toma el control a un nuevo micro nivel

Con DAB cada área y micro textura es rodeada por un área con una micro textura más fina que le permite a la tinta controlar su desplazamiento en el borde, protegiéndola de cualquier riesgo de impresión sucia. Esta tecnología forma una “pared” metafórica y única, que es aplicada automáticamente, y mejora drásticamente el contraste, el rango tonal, los textos positivos y negativos, los detalles de las sombras, generando sólidos más planos sin moteado y mejorando la legibilidad y claridad.

Los impresores empiezan a observar los beneficios de DAB en la producción, particularmente en la definición de textos y en los bordes de los sólidos que requieren más tinta. El contraste de impresión mejorado y optimizado por la DAB nos da un control de impresión que maximiza el impacto visual y la estabilidad y lecturabilidad de los textos y códigos de barras, logrando que su definición sea más estable, que no crezcan sus bordes, igualmente más estable para los códigos QR.

Los textos invertidos son un elemento común e importante a considerar en todos los trabajos. Las planchas producidas sin DAB permiten que la tinta llene los textos invertidos, que se vean los bordes más oscuros y desiguales, lo que degrada el contraste. Pero con DAB estos textos no se llenarán, permanecerán abiertos y fáciles de leer, generando la posibilidad de usar textos cada vez más pequeños, y maximizando el espacio para la marca, esto significa para las marcas mayor detalle y mejores texturas, así como tridimensionalidad en las imágenes.

El contraste de impresión, sin embargo, no es sólo impactado por la definición de los bordes. Si recordamos es la relación entre la densidad en el sólido y la densidad en el 75%. Esto significa que una buena densidad en los sólidos es crítica, pero se requiere de una densidad alta sin usar mucha tinta, o se corre el riesgo de ensuciar la impresión y destruir así el contraste. Aquí es donde las dos tecnologías se unen y generan un resultado extraordinario.  Una microtextura seleccionada correctamente con DAB genera un resultado en contraste en un rango óptimo, igualando el contraste de impresión de offset, con una aplicación uniforme y eficiente de la tinta.

Después de completar un intenso trabajo de investigación y desarrollo, hay tecnologías de planchas que permiten integrar estas dos tecnologías de manera precisa, estable y, aún más importante, ¡repetible! Haciendo que cada plancha pueda tener un resultado exactamente igual a la anterior, algo que suena sencillo pero que en la práctica no todos lo pueden hacer. Además, personalizando la micro textura a su condición para lograr el “punto dulce” de impresión, resultando en mayor densidad, mejor duración de la plancha, menos paradas en impresión y velocidades más rápidas. En los blancos, generando un cubrimiento perfecto, libre de porosidades y pinholes, logrando una capa delgada y plana de tinta que seque más eficientemente, y en impresión dorso genere beneficios adicionales en laminación, con menor aplicación de adhesivo y evitando el efecto “burbuja”.

Es un “gana-gana”.  Mayor impacto en las fotografías y mayores beneficios en eficiencia de la producción en prensa.

Una simple manera de ver estas posibilidades, es generando un test que integre estas dos tecnologías, comparando en todas las áreas críticas donde se pueda demostrar el poder de las micro texturas y de la definición avanzada de bordes.  El trabajo de más de una década de desarrollos se transforma en una prueba de un color para probar todas las tecnologías y escoger de forma sencilla la mejor combinación ideal para su característica de impresión. La impresión flexo sigue siendo un proceso complejo, de múltiples variables, pero se ha desarrollado una plancha que es capaz de simplificar la impresión, mejorarla, y más importante todavía, hacerla más rentable. ¡Es tiempo de conquistar la definición de los bordes!