63% de mipymes respaldarían un tratado global contra la contaminación plástica

De acuerdo a una encuesta de la WWF y la Fundación Ellen MacArthur, un importante porcentaje de las mipymes están a favor de medidas más estrictas para combatir la contaminación plástica, a pesar de los costos adicionales.

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El 63% de las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) a nivel mundial están a favor de un tratado global para combatir la contaminación plástica, según una encuesta reciente realizada por WWF y la Fundación Ellen MacArthur. Este apoyo se mantiene firme a pesar de los costos adicionales que podrían implicar dichas medidas.

La encuesta, que incluyó a 132 pequeñas empresas de diversos sectores, refleja un creciente compromiso del sector empresarial con la sostenibilidad ambiental. Las mipymes reconocen su papel crucial en la innovación y el cambio hacia una economía circular, a pesar de los desafíos financieros que esto representa.

Marta Longhurst, gerente de tratados globales de la Fundación Ellen MacArthur, enfatizó la importancia de las mipymes en el éxito de un Tratado Mundial sobre Plásticos. “Representan el 90% de las empresas a nivel mundial y son motores de innovación en la industria del plástico”, señaló Longhurst.

El informe titulado "Cómo hacer que el Tratado Mundial sobre Plásticos funcione para las mipymes" aborda el ciclo de vida completo del plástico, desde su producción hasta la gestión de residuos. Este estudio busca evaluar el impacto de un tratado global ambicioso, efectivo y legalmente vinculante para las mipymes.

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Uno de los principales hallazgos del informe es la necesidad de apoyo financiero para las mipymes durante la transición hacia una economía circular del plástico. Tres cuartas partes de los encuestados destacaron la importancia del financiamiento adicional para garantizar la viabilidad de sus negocios en este nuevo contexto.

Las mipymes del sector de distribución minorista, logística y embalajes, en particular, expresaron preocupaciones sobre el acceso a capital. El informe sugiere que el tratado debería incluir medidas políticas específicas, como plazos de implementación diferenciados y financiamiento específico, para asegurar una transición justa.

Además del financiamiento, el acceso a conocimientos, asesoramiento y tecnologías es fundamental para que las mipymes naveguen esta transición. La Fundación Ellen MacArthur y WWF abogan por la inclusión de medidas específicas en el tratado para apoyar a estas empresas.

Entre las medidas propuestas están la implementación gradual de regulaciones, la facilitación del acceso a plásticos reciclados y materiales alternativos, y la creación de asociaciones público-privadas para compartir conocimientos y recursos. También se destaca la inversión en I+D para materiales alternativos y tecnologías de reciclaje.

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Los Pactos sobre el Plástico, ya establecidos en varias regiones, han demostrado ser efectivos en la eliminación de artículos plásticos problemáticos y en el aumento del reciclaje y la reutilización. Estos pactos sirven como plataformas para la colaboración y la generación de conocimiento basado en evidencia.

La Red del Pacto por el Plástico ha mostrado el impacto positivo de la acción voluntaria colaborativa, aunque reconoce que es necesario un marco global para maximizar estos esfuerzos. Un Tratado Mundial sobre el Plástico proporcionaría el marco necesario para acelerar la acción política y empresarial a nivel global.